¿Quieres tener a tus hijos entretenidos este verano mientras trabajas? ¡Ellos ganarán en autonomía!
Las vacaciones están aquí, y con ellas, el caos que se forma en casa cuando hay niños. En invierno estamos acostumbrados a horarios más estrictos basados en guarderías, colegios y nuestro propio trabajo. Pero en esta época del año, con días más largos y más tiempo libre, podemos sentirnos abrumados.
Algunos padres optan por trabajar desde casa durante este período, pero, según los expertos, para muchos de ellos, tener una oficina donde vivir puede ser una fuente de problemas durante estos meses, ya que reduce su productividad y aumenta la distracción por el reclamo de los niños. Por eso es importante establecer una rutina de verano que, además de mantener ocupados a nuestros hijos, les ayude a ganar autonomía.
Ayudar con las tareas del hogar
Durante el curso les resulta más difícil participar en las tareas de casa por falta de tiempo. Como padres, a veces puede ser difícil enseñarles ciertas actividades familiares, como tender la ropa. Debes recordar que estas tareas deben adaptarse a la edad y capacidad del niño.
Podemos aprovechar este tiempo porque es cuando hay menos ropa de cama. No es lo mismo hacer esto con un edredón o nórdico de invierno que tener solo una sábana. A principios de verano podemos hacerlo con ellos para que se vayan entrenando poco a poco y si tienen la edad suficiente (a partir de 7 años) puedan hacerlo completamente solos. Si son más pequeños, hay que ayudarlos.
Para ellos es muy divertido desarrollar estos hábitos y, con el tiempo, descubrirán rápidamente cómo hacerlo solos. Puedes comenzar usando una cartulina y dibujar los contornos de los utensilios de cocina para que sepan dónde deben ir.
Cuando veas que lo dominan, es el momento de hacerlo a la hora de comer. Mantén los platos, cubiertos, vasos y servilletas al alcance (bajo la supervisión de un adulto, por supuesto) para que puedan llevarlos ellos mismos. ¡Te sorprenderán! Además, el verano es un momento ideal para llevar a los niños a la cocina a preparar platos sencillos o bocadillos.
Es muy importante que nuestros hijos sepan reciclar desde pequeños. Este hábito es fundamental para que entiendan qué hacer con cada residuo y dónde tirarlo. Un juego muy divertido consiste en elegir cuatro cartas con el color del recipiente: azul, verde, amarillo y naranja. Los pegamos en la zona visible de la casa y los peques tienen que rellenarlos con los elementos que elijamos.
Si tienen entre 2 y 5 años, nos pueden ayudar pasándonos pinzas para la ropa o ropa para colgar. Cuando crezcan, pueden sacar la ropa de la lavadora y tenderla para que se seque.
Este también es un buen momento para que practiquen dónde almacenar los artículos para lavar y separar los artículos blancos de los de color. Podemos enseñarles a juntar los calcetines por parejas y luego doblar la ropa ellos mismos.
Después de jugar, deben saber que tienen que poner todo en orden y colocarlo como lo encontraron. Saber cómo limpiar una habitación les dará suficiente autonomía para comprender que no pueden poner la ropa en el suelo si está para lavar o dejarla en la cama desordenada.
¿Qué os ha parecido esta rutina? Ponla en práctica este verano y conseguirás tener más tiempo para ti mientras ellos ganan en autonomía y se entretienen. ¡Os esperamos en nuestras tiendas Garabatos!