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Mundo Garabatos

Cómo mantener cálida la habitación

Los niños son muy sensibles a las variaciones de temperatura y conseguir que las habitaciones mantengan el calor adecuado es complicado.

Mantener cálida la habitación infantil
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25/11/2020

Los niños son muy sensibles a las variaciones de temperatura y conseguir que las habitaciones mantengan el calor adecuado es complicado. Tener la calefacción encendida todo el día no es rentable para nadie, ya que las facturas se disparan con cierta facilidad, sobre todo para las familias que viven en zonas frías y con inviernos largos. 

 

Retener el calor de la habitación es siempre la mejor opción, pero también el gran reto del invierno. En Garabatos como expertos en decoración infantil nos sabemos todos los truquitos para que la habitación de tus hijos se mantenga calentita durante mucho más tiempo:

 

La madera, el material antifrío.

La madera es uno de los materiales ideales para el mobiliario del hogar, no solo por su resistencia y durabilidad, sino por ser un excelente bloqueador del frío. En Garabatos conocemos bien sus beneficios, por ello siempre apostamos por este material para todas nuestras composiciones. Además, colocar grandes muebles de madera, como estanterías o armarios, en las paredes exteriores dificultará el enfriamiento de dichas zonas.

 

Accesorios de invierno.

Añadir accesorios hechos a base de materiales gordos y calurosos favorecerá la calidez del entorno. Las cortinas impiden que el frío entre por las ventanas, especialmente si al llegar el invierno las cambiamos por cortinas de lana u otros materiales pesados; las alfombras además de decorar, mantienen los suelos calientes y los edredones harán que tu hijo esté calentito dentro de la cama.

 

El sol, tu mayor aliado.

Aprovecha las horas en las que entra más sol por la ventana para ventilar la habitación, sobre todo a medio día cuando los rayos son más intensos. Si la calefacción no es central, recuerda apagarla durante el rato que mantengas las ventanas abiertas; así no malgastarás energía.

 

Cierra cualquier salida de calor.

Cuanto mayor sea el aislamiento mejor se conservará el calor de la casa. Al llegar la noche baja las persianas para evitar que el frío entre por la ventana, ya que los escapes que se producen por ellas son una de las principales causas por las que necesitamos encender de nuevo la calefacción. La puerta también es mejor mantenerla cerrada para que el calor de la habitación no salga hacia el resto de la vivienda y cualquier ranura o rendija que pueda haber tápala con una cinta adhesiva aislante.

 

Aplicando estos sencillos trucos notarás que la habitación se mantiene caliente por mucho más tiempo y no necesitarás de tantas horas de calefacción al día para mantener la habitación de tus hijos a una temperatura adecuada para ellos.